Nuestra casa cuenta con múltiples ventanas y con las salas y espacios adecuados para el desarrollo del aprendizaje natural. Contamos con dos aulas luminosas y grandes (perfectamente preparadas para 6 u 8 alumnos y alumnas), un gran jardín o huerto donde los niños aprenden a cuidar de la naturaleza, una sala común para jugar y compartir experiencias, un espacio donde se puede hacer deporte (canasta de baloncesto, patinetes, pelotas, etc.), una pequeña sala de estudio, baños y cocina.  

El centro es 100% seguro: todo el recinto se encuentra protegido por una valla y la puerta únicamente se abre si tocan el timbre. Además, no hay tráfico ya que la carretera termina aproximadamente unos 500 metros tras pasar nuestra ubicación. El jardín y las terrazas son accesibles desde la propia casa.